– Hola, quién es?, sos vos, Juan?– No, mamá, soy Jorge. ¿Qué Juan?
– El del diario, hijo, el de los chismes. Estoy esperando que me llame.
– Y para que te va a llamar? Lo conocés?
– No, pero le mandé una carta para quejarme.
– Ay mamá! Siempre mandando cartas. Y de que te ibas a quejar, ahora?
– Es que el otro día no me pasaron a buscar la basura, deben estar enojados porque siempre le tiro raid a las bolsas, es porque los perros y gatos me las rompen.
– Es que hubo paro de recolectores, pero ya volvieron a la normalidad. Todavía no se llevaron las bolsas?
– La bolsa está como rara. Dicen que sube que baja, yo no entiendo una mierda pero eso dicen. Que están subiendo las acciones argentinas en uol no se que.
– En Wall Street, mamá. Es que hay un optimismo generalizado por lo cerca que estamos de la vacuna.
– Qué vacuna?
– La del coronavirus, mamá, ya no te acordás que estamos en pandemia?
– Ah, si, me acordé del pan de miga para los sanguchitos, así vamos a hacer un picnic al arroyo Napostá, que ahora está más seguro.
– Más seguro, por qué?
– Porque se encargaron de sacar a los drogados. Los que salen de los boliches.
– No, má, quieren hacer un dragado. DRA-GA-DO. Pero parece que no van a dragar, hay muchos especialistas que dicen que es mejor limpiarlo.
– Limpiarlos? A los drogados? No, que mal, es gente enferma, hay que tratarlos.
– Mamá, estoy hablando del arroyo Napostá.
– Hablando de apostar, cuando abre el Bingo?
– No sé, pero vos no podés ir a gastar plata ahí, te vas a quedar seca.
– Andá a cagar, hijo. Seco nos vamos a quedar todos este verano.
– Es cierto. Siempre zafábamos porque la mayoría de la gente se iba de Bahía, pero esta vez viene complicada la cosa.
– Bueno, hijo, te corto porque tiene que llamar Juan. Chau!
Dejá tu Comentario